Marta Buchaca: Mujer y teatro
Al principio de mi carrera, pasé años afirmando que en el mundo del teatro no había discriminación por género. Lo afirmé, incluso, en debates y entrevistas, porque estaba convencida de ello. Supongo que era mi ingenuidad veinteañera o, simplemente, la imposibilidad de concebir que en el siglo XXI la mujer tuviera todavía un puesto inferior que el hombre. Crecí, trabajé cada vez más, y me relacioné con directores artísticos (en masculino) de teatros públicos y privados. Y, poco a poco, me di cuenta de que tenían razón las que afirmaban que no éramos iguales, que nos trataban diferente, que nos discriminaban claramente. Y yo, añado, “casi sin darse cuenta”. Porque esto es con lo que me he encontrado en el mundo teatral, cosa que, obviamente también sucede en la sociedad en general: que no se dan cuenta. Que el patriarcado está tan arraigado, que te tratan diferente solo porque eres mujer, y ni se percatan de ello.
Hace poco, estaba dirigiendo una obra en Nueva York y el autor de la pieza, en un momento dado, empezó a decirme qué debía decirle a las actrices. Dejé que hablara un buen rato y, cuando hubo acabado, le dije “si fuera un hombre no me dirías cómo hacer mi trabajo”. Me miró con estupefacción y, de golpe, se echó a llorar, porque, como una especie de revelación, entendió. Entendió lo que vivimos las mujeres a diario, lo que debemos soportar. Y él, creyéndose de izquierdas, tolerante, abierto, se dio cuenta de que era machista, de que, efectivamente, me había tratado de esa forma porque era una mujer.
Nuestra sociedad lleva siglos oprimiendo a las mujeres, hemos aprendido comportamientos machistas que están integradísimos, y desprenderse de ellos no va ser ni fácil ni cosa de un día.
Ni que decir tiene que la mujer tiene tanto talento y capacidad como el hombre, pero lo digo, porque sé que mucha gente no piensa lo mismo. Más de un compañero, cuando le he contado que tengo un proyecto en tal o cual teatro, me ha contestado con un “Claro, es que necesitan mujeres”. Y no hablo de gente mala ni de enemigos. No. Hablo de COMPAÑEROS que aprecian mi trabajo y mi talento. Pero que, inevitablemente, todavía piensan que cuando una mujer consigue algo, es una cuestión de cuota. Y eso, a los mujeres, nos hace mucho daño porque, a menudo, consiguen que nos los creamos.
La última excusa que está de moda entre algunos directores artísticos es que, si no hay mujeres programadas, es porque las mujeres no mandan proyectos. Lo he escuchado más de una vez y me parece de vergüenza ajena. Ahora resultará que, si no nos programan tanto como a los hombres es porque no llamamos a su puerta. ¿En serio alguien puede creerse eso?
¿Cómo van a programar tantas mujeres como hombres si la mayoría de directores artísticos de teatros son hombres? Si hacemos una radiografía de los teatros de Madrid y Barcelona, obtenemos un dato escandaloso: sólo cuatro directoras artísticas: Natalia Álvarez Simó (Teatros del Canal), Helena Pimenta (Compañía Nacional de Teatro Clásico), Carme Portacelli (Teatro Español) y Tania Brenelle (Sala Villarroel). ¡Cuatro!
Consecuencia de eso, las programaciones de la mayoría de teatros están llenas de propuestas masculinas que nos presentan una visión sesgada de nuestra sociedad.
En Cataluña, por suerte, hay algunos colectivos de mujeres muy activos que se están poniendo las pilas denunciando esta situación : #onsonlesdones, #donesicultura o #donamescena, evidencian constantemente la falta de protagonismo de la mujer en nuestra cultura.
El primer paso para la visibilidad, es que las mujeres tomen el mando de nuestros teatros. Hasta que esto suceda, me permito hacer una pequeña lista (que podría ser mucho más amplia) para los directores artísticos que afirman no recibir proyectos de mujeres. Aquí van los nombres de algunas de mis compañeras autoras que tienen tanto o más talento que sus compañeros varones y que, les aseguro, tienen proyectos interesantísimos que presentar: Carolina África, Lola Blasco, Lucía Carballal, Claudia Cedó, Cristina Clemente, Irma Correa, Denise Despeyroux, Clara Gayo, Yolanda García Serrano, Lucía Miranda, Yolanda Pallín, Itziar Pascual, Eva Redondo, Laila Ripoll, Carolina Roman, Marilia Samper, Mercè Sarrias, Victòria Szpunberg o Helena Tornero.
Marta Buchaca
Autora y directora
Barcelona, 20 de diciembre de 2017
Artículo publicado en la Revista Teatros el 31 de diciembre de 2017
